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Cuando llegue, vi el portal del escaparate era pequeño, e igual que la recepción, cuando entre dentro del local, vi que estaba bien decorado, el ambiente era agradable, había un sofá, donde una mujer, eso lo tengo que decir, no con muy bueno formas me recibió sin levantarse, llamo a grito a Angie, ya que por la hora se imaginó que era yo el cliente que pedí a Angie.
Una chica guapa se levantó del sofá, delgada pero proporcionada, me recibió, se acercó para saludarme muy educadamente y me dijo que la acompañara a la habitación. Entré primero yo y luego ella, la habitación era bonita, cálida, y con una iluminación agradable para un masaje emocional. Había un Tatami y al lado mismo, encajonada, una ducha roja, con una mampara de cristal protegiéndola.
Angie, me pregunto por el servicio que quería, yo le dije que quería una hora de masaje, entonces me propuso un “body body”. Me hablo de 50 euros, entonces le pregunte si incluía, la terminación, o sea el final feliz, me dijo que no, que el extra eran 20 euros mas. Pensé en un momento, que salía de mi presupuesto, pero quise probar, ya que para decir que algo és caro, hay que probarlo, todo depende de la calidad del servicio.
Me desnudé, me dijo que me podía duchar, lo hice caso, para estar preparado y estar a punto con ella. Angie, sonriendo, me dijo que se iba a preparar, señalando su parte intima.
Cuando acabe de ducharme, me estire en la cama. Angie había preparado con mucho cariño y cuidado el Tatami, para que todo estuviera apunto y bien. Me eche en el y esperé que llegara. Entro, y empezó a quitarse la ropa, mirarla, fue un momento muy erótico. Con mucho cuidado dejo su ropa encima de un mueble.
Su cuerpo era bonito, de pechos pequeños, pero proporcionados, y de culo, no muy salido. Una mirada bonita y se movía con delicadeza.
Se coloco en frente mío para hacerme el masaje, su pubis medio rasurado, al estilo brasileña, estaba a un palmo de mi cara, fue un momento muy excitante y erótico. Empezó el masaje, suave y fue incrementado lo de intensidad
Al rato me di la vuelta, me quedé de cara y ella a mi lado. Le dije que ya quería el “body body”, entonces cogió el aceite, y me chorreo hasta ponerme muy aceitoso, y acabo poniéndose aceite por sus pechos y parte de su cuerpo.
Fue entonces cuando algo cambió, nos unimos en un solo ser, fue brutal el contacto, una excitación que me poso muy cachondo, eso sí, con mucho control, para que durara el máximo, tenía una hora por delante. Su cuerpo, sus pechos y su pubis rozaban y frotaban todo mi cuerpo desnudo, note que mi pene note iba a explotar en cualquier momento. Respiré i controlé.
Sin pensarlo, me levante y le dije que se echara ella, lo hizo sin cuestionar, me dejo hacer. allí entre yo, para regalarle un masaje a Angie. Muy suavemente la masajeé, le besé sus pechos, tenía un pezón de haber sido madre, grandes y salidos, disfruté un montón tocando sus pechos y acariciando todo su cuerpo de arriba a abajo. Cuando llegue a su pubis, ella me complació con un regalo, permitiéndome saborear su fruta más preciada, en su parte más íntima, fue brutal, tocarla y besarla. Ella se retorció de placer, esto me excitó mucho más. Estuve así, un rato, hasta que se corrió Angie.
Como que el tiempo iba pasando, cambiamos los papeles, ella se puso encima, para acabarme el “body body”, ya iba muy excitado y ella quería que me lo pasara bien, decidí no controlarme más y dejarme ir. Mi respiración se aceleró hasta que me corrí, toda mi leche salió impactada en su cuerpo y en ese momento me vino un maravillo orgasmo largo y relajante.
Ya relajado, Angie, me empezó, con cariño y suave, a limpiarme, fue muy tierno el momento. Como todavía quedaban unos 15 minutos, y estaba yo muy a gusto, Angie continuo con un masaje muy suave en las piernas. Cuando quedo poco tiempo, me animo a que me duchara para terminar el servicio. Así lo hice.
Me vestí, mientras ella recogía el protector de la cama, una felpa muy agradable, por cierto. Hablamos y le dije que la chica del anuncio no era ella, y me dijo exacto que lo era, que esta chica ya no trabajaba en el centro, tengo que reconocer que no me preocupó nada, porque Angie consiguió olvidarme de esa chica, Angie estuvo muy bien, me excitó mucho y disfruté de de su masaje cuerpo a cuerpo, con regalo incluido. Me lo pase muy, pero que muy bien.
Recomiendo este local, sus instalaciones están bien, limpias, ordenas y bien decoradas, la iluminación adecuada, las chicas son guapas, y los masajes, por su calidad, tienen un precio justo, por tanto, repetiré y si puede ser con Angie.
Belleza
Masaje
Morbo
Coste